(Antes de nada quiero aclarar que esto es una fanfiction)

Era el día 30 de agosto justo después de cenar ,en la casa de los Granger-Weasley.

-¡Mamá tengo que enviar pronto la lechuza a Hogwarts!-

Rose que estaba muy nerviosa porque todavía no había decidido que asignaturas coger para este curso, porque le gustaban todas y no quería perderse ninguna.

Entonces la llamaron sus padres

-Roseee! Ven aquí te queremos decir una cosa - Le dijeron Ron y Hermione Rose estaba muy intrigada, tenía un montón de preguntas como: ¿Qué le dirían ? ¿Qué pasaría?... Pero antes de qué terminara de plantearse todas las preguntas, se dio cuenta de qué ya había llegado al salón, entró y miró a sus padres le estaban mirando seriamente, entones Rose pregunto

-¿Qué pasa mamá, papá porque me miráis así? - Rose tenía un tono de miedo en la voz

-No te preocupes, no te vamos a reñir , no has hecho nada malo solo que... Te queremos regalar una cosa, que antes fue de tu madre y antes de la profesora... -dijo Ron pero antes de que siguiera diciendo cosas Hermione la interrumpió -Bueno Ron, no te salgas del tema, en fin lo que te queríamos decir es que te vamos a regalar una cosa- -Si, mira te queremos regalar un...-dijo Ron con emoción

-Ahora ya es muy tarde solo te digo que te va a ayudar para poder ir a todas las clases aunque sean a la misma hora-dijo Hermione